Columna de Paulina Yazigi: ¿Cómo subimos las pensiones?

En Chile nos damos muchas vueltas discutiendo distintas fórmulas para ver cómo se pueden subir las pensiones. Pero la ecuación tiene solución hace tiempo. Desde la Comisión Marcel, pasando por la Comisión Bravo, y diversos documentos del FMI, OCDE y otros. No hay fórmula secreta para subir las pensiones de forma sostenible, estas se deben reforzar desde los tres pilares de nuestro sistema mixto: el pilar no contributivo (PGU), el pilar contributivo obligatorio (administrado por las AFP), y el voluntario (APV). Para reforzar el segundo pilar, tal como su nombre lo consigna, las personas debemos contribuir.

¿Cómo reforzar esa contribución? En 2023 desde la Asociación de AFP (AAFP) elaboramos el documento Hoja de Ruta 555, que contiene cinco grupos de medidas para elevar pensiones. En la segunda versión del documento de este año, estamos mostrando que aquellas medidas más que duplican las pensiones para los hombres y más que triplican las de mujeres, con incrementos en las tasas de reemplazo de más de 70 puntos porcentuales (pp).

¿DE QUÉ TIPO DE MEDIDAS HABLAMOS?

En el primer grupo de propuestas, se abordan medidas relacionadas a disminuir las lagunas previsionales y enfrentar la informalidad. Recordemos que por cada 10 años adicionales de cotización podrían aumentar las pensiones casi 50%. Dentro de este grupo, también se contempla medidas como el bono por hijo recién nacido y el ahorro vía consumo (sobre el cual trabajamos desde la AAFP para mejorar la faceta “ahorro” en nuestra aplicación MisBeneficiosAFP).

En el segundo grupo de propuestas, analizamos el modificar parámetros claves, como lo es la tasa de cotización y enfrentar la mayor longevidad. Si se considerara elevar la contribución hasta, por ejemplo, el promedio de la OCDE (~ 18%), el incremento significaría en el largo plazo casi un 80% más en el monto de la pensión. La “novedad” en esta propuesta está en que además analizamos que se pueda diferenciar la tasa de cotización por tramo de remuneración, a fin aliviar la presión para los trabajadores de menores ingresos y de las pymes. A su vez estudiamos aumentar la edad legal de retiro para aquellos menores de 40 años, a través de un incremento gradual varios años. Los impactos en la pensión estarían en torno a 9% para los hombres, y de 60% para las mujeres.

El tercer grupo de propuestas reúne medidas relacionadas a la mejora en la regulación del régimen de inversiones de los fondos de pensiones. Esto podría llevar a elevar pensiones en torno a 20%.

En cuarto lugar, se incorpora una medida que sugiere aumentar el monto de la PGU mediante la implementación de un nivel “objetivo”. La propuesta establece una PGU base, al nivel de la línea de la pobreza, cuyo monto iría aumentando en función de los años cotizados y cuya meta de pensión podría ser, por ejemplo, $400 mil. Esto ayuda a incrementar las pensiones, al mismo tiempo que premia el buen comportamiento previsional, incentivando la formalidad laboral. Esto no significa que se convierta en un pi lar contributivo, ya que seguiría siendo financiado con impuestos generales.

Por último, se propone incluir educación financiera a edades tempranas, sensibilizar sobre la importancia de la seguridad social y utilizar nuevas tecnologías para llegar a las generaciones más jóvenes con educación financiera.

Si gran parte de estas medidas se adoptaran juntas, Chile tendría un sistema previsional en el mediano a largo plazo en que las pensiones de los hombres serían al menos un 150% más altas, y de las mujeres cerca de un 230% mayores, ambos con un aumento de sobre 70 puntos en sus tasas de reemplazo.

Está claro el camino a seguir para #MejoresPensiones en el mediano a largo plazo. ¿Y qué hacer en el corto plazo?

Además de no repetir los retiros de los ahorros previsionales, las fórmulas para elevar hoy las pensiones no son las mismas que para un aumento sostenible en el largo plazo. El cómo subir pensiones hoy tiene más que ver con un problema fiscal que previsional.

La buena noticia es que, si se adoptaran todas las medidas de la Hoja de Ruta 555, habría, a la larga, una menor presión fiscal en el pilar solidario. El subir pensiones hoy a costa de las generaciones futuras, es “pan para hoy, hambre para mañana “.