En conversatorio DF expertos manifiestan rechazo a préstamo y plantean que el 6% debe ir íntegramente a las cuentas individuales

El expresidente del Banco Central, Vittorio Corbo; la economista Michelle Labbé y el académico de la FEN de la U. de Chile, Claudio Bonilla, coincidieron en que las mejoras de las pensiones actuales se deben hacer con impuestos generales, y no con la cotización de los trabajadores.

En el marco del conversatorio “Préstamo al fondo social e impacto en pensiones”, organizado por la Asociación de AFP y Diario Financiero, tres especialistas abordaron los riesgos y desafíos asociados a esta propuesta incluida en el proyecto de reforma previsional del Gobierno.

Esta iniciativa consiste en destinar parte de la cotización adicional del 6% para crear un fondo social que aumente las pensiones actuales y futuras. El mecanismo funciona como un “préstamo” que el Estado recibiría a partir de los aportes de los trabajadores activos, con la promesa de devolver esos recursos en el tiempo.

Sin embargo, ha recibido numerosas críticas por sus características similares a un sistema de reparto, los riesgos de sostenibilidad que presenta y por perjudicar las cotizaciones de los trabajadores formales, lo que ha sido incluso considerado como un “impuesto al trabajo”.

Los panelistas coincidieron en que la mejor solución para fortalecer el sistema de pensiones es destinar el 6% adicional íntegramente a la capitalización individual, pues el préstamo no solo implica riesgos de sostenibilidad fiscal a largo plazo, sino que también afecta los incentivos del mercado laboral al generar un impuesto sobre los trabajadores formales, en un contexto ya marcado por alta informalidad y bajo crecimiento económico.

El expresidente del Banco Central, Vittorio Corbo, explicó que “en el mundo los sistemas de reparto no funcionan. Por el envejecimiento de la población no son sostenibles, entonces todos se han ido moviendo hacia la capitalización individual. Como nosotros ya tenemos este sistema, entonces construyamos sobre lo que tenemos y no nos movamos en un camino distinto al resto”.

La economista y académica de la Universidad San Sebastián, Michelle Labbé, complementó lo expuesto por Corbo y dijo que “los problemas sociales en todos los países del mundo se solucionan a través de los ingresos generales de la nación. Por lo tanto, si yo quiero ayudar a los pensionados que hoy tienen pensiones bajas, lo correcto es hacerlo con recursos del presupuesto público; no con los aportes de los trabajadores actuales, que van a enfrentar una mayor expectativa de vida y tasas de reemplazo más bajas”

El académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile y experto en pensiones, Claudio Bonilla, expuso que “el préstamo al fondo social genera riesgos de sostenibilidad porque, en el fondo, es un sistema de reparto encubierto”. Según Bonilla, lo que realmente hay es un ‘vale por’, que podría no pagarse en el futuro.

“Sabemos que los sistemas de reparto no han funcionado en ningún lugar del mundo, y Chile no va a ser la excepción. Ese ‘vale por’ no va a tener recursos para pagarse cuando los más jóvenes se jubilen, y eso significa que en el futuro se tendrán que cambiar los parámetros o simplemente no se pagará”, detalló Bonilla.