Cotizaciones

Las cotizaciones son el aporte mensual que realiza el trabajador, que corresponde al 10% de su ingreso imponible. Estas cotizaciones van directamente a una cuenta individual a su nombre en la AFP a la que está afiliado.

Este aporte le permite al trabajador tener un ahorro para: Pensión de vejez o anticipada, Pensión de invalidez Pensión de Sobrevivencia para sus beneficiarios en caso de muerte.

Afiliación voluntaria
Toda persona natural que no genere ingresos puede afiliarse de manera voluntaria a una AFP y cotizar desde un ingreso mínimo.

Una vez cumplida la edad legal de pensión

Si una persona que está pensionada continúa trabajando, tiene la posibilidad de seguir cotizando, pero también puede eximirse de hacerlo, expresándolo por escrito tanto a su empleador como a la AFP en la que está afiliada.

Es importante aclarar que no es obligatorio pensionarse a la edad legal de jubilación y una persona puede seguir trabajando hasta que lo estime conveniente exceptuando a los siguientes trabajadores:

• Trabajadores de la Administración Pública afectos al Estatuto Administrativo
• Trabajadores municipales afectos a la Ley No.18.883
• Profesionales de la Educación del Sector Municipal afectos a la Ley No.19.070
• Trabajadores afectos al Estatuto de Atención Primaria de la Salud Municipal
• Funcionarios del Poder Judicial afectos al artículo 332 No.6 del Código Orgánico de Tribunales

Si un trabajador jubila, pero sigue cotizando, en caso de licencia médica tendrá derecho a recibir el pago siempre que cuente con un mínimo de seis meses de afiliación al sistema previsional y teniendo, por lo menos, tres meses de cotizaciones.

Quienes se pensionan a la edad legal –60 años para las mujeres y 65 para los hombres– deben tener presente que las pensiones son una renta para efectos tributarios. Es decir, si recibes sueldo y pensión, la situación frente a los impuestos podría cambiar: es posible que termines pagando más impuestos de lo que pagabas antes de la pensión.

Por todas estas razones, para quienes quieren seguir trabajando, los expertos recomiendan postergar la jubilación. De esta manera tu pensión aumentará, no sólo porque cotizaste el 10%, sino también porque el saldo en la AFP se sigue invirtiendo y vuelve a ganar rentabilidad.